domingo, junio 12, 2011

Gliese

Por otro mundo,
de espíritus, de guerreros
sumió el césped mis pisadas.

Bajo una noche, por un pasillo,
halló descanso encantador mi alma.
Madera fresca en la posada:

Una hembra,
un arco,

y una flecha.

2 comentarios:

Stardust Libélula dijo...

Ultimamente en la poesia, en la tuya y en la de otra persona, encuentro un camino ya olvidado en los restos de lo que alguna vez fui.

Una melancolia me arrebata el corazon para estrujarlo entre las piedras de los recuerdos vagos que me inquietan y perturban, con sentimientos que no me dejan en paz ni a luz ni a sombra.

Ralemz dijo...

Ese comentario incluso fue poético.

Ya te leo, yo también.